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La verdadera Iglesia de Dios...

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Nos iluminaste con la Luz de Cristo...

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lunes, 26 de septiembre de 2016

Guion: Domingo XXVII del Tiempo Ordinario




 
Formulario de Misa: aquí.


Ciclo C

Introducción

"Queridos hermanos y hermanas, toda asamblea litúrgica es espacio de la  presencia de Dios.

Reunidos para la Sagrada Eucaristía, los discípulos del Señor  nos sumergimos en el Sacrificio redentor de Cristo, proclamamos que Él ha resucitado, está vivo y es dador de la vida, y testimoniamos que su presencia es gracia, fuerza y alegría. Abramos el corazón a su Palabra y acojamos el don de esa presencia". (Cf. S.S. Benedicto XVI, Homilía en el Foro Itálico de Palermo, 03/10/2010).

El canto de entrada expresa el gozo con que acogemos estos dones.


Primera lectura: Hab. 1, 2-3; 2, 2-4

Una situación de violencia, iniquidad y opresión, es ocasión para que el profeta Habacuc nos asegure que el justo que confía en Dios nada debe temer.

Segunda lectura: II Tim. 1, 6-8. 13-14

La exhortación de Pablo a Timoteo nos enseña que solo la fe confiada y humilde puesta en Aquel a Quien todo Le debemos, distingue la auténtica caridad del mero asistencialismo.

Evangelio: Lc. 17, 3b-10

Porque "somos siervos de Dios y no (...) acreedores frente a Él, el Evangelio de hoy nos exhorta a presentarnos siempre ante el Señor con humildad". (Ídem).


Oración de los fieles

Las siguientes preces, con las necesarias adaptaciones, están tomadas de la Santa Misa "Por la paz y la justicia", presidida por Su Santidad Francisco en Emiratos Árabes Unidos, el 5 de febrero de 2019:


Elevemos confiadamente nuestras oraciones a Dios Padre, Señor de la vida y de la historia, y esperemos de Él alegría y salvación.

R. Padre, escúchanos y danos la paz.

-Padre amoroso, protege al Papa y a todos los obispos. Que anuncien con franqueza a Jesús, único Salvador, y guíen a nuestros hermanos por los caminos de la santidad. R.

-Padre sabio, ilumina con tu Espíritu Santo a nuestros gobernantes y a todas las autoridades civiles. Que sirvan con coraje a la dignidad de las personas y promuevan un futuro de esperanza para todos. R.

-Padre misericordioso, convierte con tu gracia el corazón de los pecadores y violentos. Detén las guerras, vence el odio, y ayúdanos a ser embajadores de justicia y paz. R.

-Padre providente, acompaña con tu bendición a todos los migrantes y trabajadores que viven en este país. Que su sacrificio y empeño florezcan en la prosperidad de sus familias. R.

-Padre tierno, consuela con tu benevolencia a nuestros hermanos signados por el sufrimiento y la enfermedad. Que la hora del dolor se transforme para ellos en ocasión de crecimiento humano y de apertura a la verdad de tu amor. R.

-Padre esplendoroso, admite a contemplar tu Rostro a nuestros hermanos difuntos. Purifícalos de toda mancha de pecado y dales la alegría de la perfecta comunión Contigo. R.


Oración conclusiva

"Padre, que nunca abandonas a tus hijos, escucha sus plegarias y sostenlos en la hora de la tentación. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén".

 

O bien:

Las siguientes preces, con las necesarias adaptaciones, están tomadas de la Santa Misa en la Apertura de la Asamblea especial del Sínodo de los Obispos sobre el tema: "Amazonia, nuevos caminos para la Iglesia y para una ecología integral", presidida por Su Santidad Francisco en la Basílica Vaticana, el 6 de octubre de 2019:


Hermanos queridos, con constancia de hijos, elevemos al Padre nuestra plegaria, y con docilidad de siervos, dispongámonos a vivir en plena obediencia a su voluntad.

R. Te rogamos, óyenos

-Padre, colma con el poder de tu Espíritu el corazón y la mente del Papa, de los cardenales y de los obispos; que custodien íntegro el don de la fe que se les ha confiado. R.

-Padre, suscita en los gobernantes un auténtico espíritu de servicio y de gratuidad; que promuevan el verdadero bien de los pueblos. R.

-Padre, reaviva en todos los pobres de la Tierra la esperanza y el deseo de justicia; que confíen siempre en la fidelidad de tu amor. R.

-Padre, sostén con tu gracia a todos los misioneros y catequistas; que jamás se avergüencen del Evangelio y del Señor Resucitado. R.

-Padre, da a tu Iglesia numerosas y santas vocaciones sacerdotales; que nunca nos falten ministros del altar y del perdón. R.

Oración conclusiva

"Dios, Creador del universo y Padre providente, acoge el clamor de tus hijos y renueva en ellos los prodigios de tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén".


O bien: (otro formulario)

R. Que escuchemos siempre tu voz, Señor

O bien:

R.
Auméntanos la fe, Señor.

-Para que la Iglesia, bajo la guía del Papa N y aprendiendo a discernir los signos de los tiempos, sepa transmitir el Evangelio de salvación a los cristianos y a los hombres de buena voluntad de hoy. R.

-Para que los que en medio del dolor claman día y noche al Señor, escuchen, como el profeta Habacuc, las palabras esperanzadoras del Dios de todo consuelo. R.

-Para que los ministros sagrados, al igual que Timoteo, "reaviven" el don de la imposición de las manos, que la Iglesia les ha conferido para gloria de Dios y salvación de las almas. R.

-Para que los que confesamos a Cristo como Señor y Redentor, recibamos de Él la gracia de poder perdonar de corazón al hermano que nos ofende, aun cuando lo haga reiteradas veces. R.

-Para que quienes viven la etapa final de su existencia terrena, experimenten la compañía amorosa de María, que atiende al clamor de los que, a lo largo de la vida, le han pedido su intercesión para "la hora de la muerte". R.

A continuación, se propone como otra oración conclusiva de las preces, una colecta alternativa a la de este domingo, tomada de la edición italiana del Misal Romano y traducida al castellano. Se reemplaza la conclusión trinitaria larga, propia de toda colecta, por la breve, típica de las demás oraciones litúrgicas:

"Oh, Padre, que escuchas a los que tenemos fe como un grano de mostaza, concédenos humildad de corazón, para que cooperando con todas nuestras fuerzas en el crecimiento de tu Reino, nos reconozcamos siervos inútiles que has llamado a revelar las maravillas de tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén". 


Ofertorio

Pan, vino y agua. Que tan sencilla como estos dones eucarísticos sea la ofrenda de todo lo que somos y poseemos.


Comunión

Orábamos con el salmo de hoy:

"Doblemos la rodilla ante el Señor que nos creó".

Esta invitación a adorar al Señor con todo nuestro ser, adquiere su pleno significado cuando estamos ante Jesús Eucaristía; más aún, cuando Él viene a nosotros en este Santísimo Sacramento.


Despedida

"Ojalá hoy escuchen la voz del Señor".

Estas palabras del salmo de hoy,  son una sugestiva jaculatoria, que podemos orar y meditar durante la semana que comienza.


26 de septiembre de 2016, memoria litúrgica de los santos Cosme y Damián, mártires. Entrada dedicada a ellos.
(Última actualización de la entrada: 1°/10/22).

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